PROSA Nº 1 DESDE MI CAPARAZÓN
Día 22 de confinamiento por el Covid-19, Madrid, 09:00 horas:
No he podido escribir nada en los 21 días anteriores. No podía, estaba incrédula y aturdida de todo lo que estaba pasando a mi alrededor y, aunque sigo en shock, esta mañana he hecho un sacrificio enorme. Creo que si no escribo voy a explotar, me desangraré de ahogo y pena. Mi vida ha estado llena de altibajos y, aunque creía que había vivido muchas cosas, jamás imaginé, ni en la peor novela de ciencia ficción, que viviríamos unos días así: presos en nuestras propias casas y oyendo noticias tan desgarradoras.
A veces creo que es sólo una pesadilla y que en el telediario pronto dirán: “Todos a la calle, se ha hecho un experimento para probar la resistencia del humano y ¡hemos pasado la prueba!, ya pueden hacer vida normal. Estos días no han sido reales”. Pero no, lamentablemente no es así, esto es real y mi angustia sigue…
Al despertar, abro los ojos, miro alrededor y vuelvo al duro presente. Agradezco esas horas en las que viajo a otra dimensión cuando duermo y desconecto un poco, aunque en muchos de mis sueños una sombra contaminante persigue mi quietud.
Soy tan sensible que hay momentos en que la situación parece superarme, pero debo animar a familiares y amigos que están peor que yo. Rezo por ellos y por mí… A pesar de todas las caídas, este cuerpo que parece débil y frágil se levanta más fuerte cuando se golpea la cara con el fondo de las dificultades. No obstante, llevo tres semanas sin poder conciliar bien el sueño por las noches, pensando en la sociedad, en lo valientes que son todos los que trabajan en los hospitales y en los que siguen moviendo el mundo.
No estamos preparados como sociedad para ésto. Es algo nuevo y aterrador. Algo desconocido nos tiene las 24 horas en alerta y, además, es un enemigo invisible, por lo que a veces llego a dudar de si es y está o no. Y me confío a ratos y creo que no existe. Pero ha llegado y convive entre nosotros haciendo de las suyas, con su calamitosa expansión de pena y muerte que arrastra cifras, transformándonos en fatídicos números y estadísticas.
Este virus nos separa físicamente de nuestros seres queridos, prohíbe los abrazos y los besos y nos golpea con el peor de los látigos de espinas contra los corazones de los dolientes, por las almas que no pueden despedirse y viajan para siempre hacia ese lugar de eterna Paz. ¿Cuántas cosas quedan sin decir el día que el virus hace estragos en el cuerpo y, entre fiebre y tubos, una vida se desvanece sin remedio? Pero tengo la certeza de que esas ánimas nos acompañarán de forma constante y celestial para recordarnos cada jornada que hay que vaciar cada día y sin reservas, las jarras de amor que nos entrega el Universo al amanecer para compartirlo con todos los que nos rodean.
Creo en una segunda etapa, en una nueva vida en comunión. Estoy convencida de que los ángeles que parten a causa de esta pandemia, son los elegidos para la inmensa y trascendental misión de hacernos llegar desde los prados del Más Allá, la fuerza, la paciencia y la fe para poder seguir en este mundo que se vuelve cada vez más difícil. Y los que sobreviven a esta terrible enfermedad, con la savia de inmunidad nos harán cambiar como sociedad para valorar lo que realmente se necesita para ser feliz. Ojalá que todo esto no haya sido en vano.
(Continuará…)
Ha sido un torbellino de noticias que uno no sabe si creer o no. Además los que dicen que son optimistas y también los contrario. Bueno, hay que seguir soportando. Uds empiezan a salir y nosotros vamos entrando . Ojalá la gente entendiera que no se puede compartir con familia ni amigos pero no hacen caso. Además todos haciendo cualquier cosa menos estar en casa.
Gracias por compartir tus letras.
Ivonne
Lamentablemente así somos. Aquí en España al principio tampoco le tomamos el peso al asunto. Sin embargo, poco a poco lo vamos superando. Muchísimas gracias por tus palabras. Un abrazote.
Qué forma tan especial y llena de realidad de retratar la situación que estamos pasando.
Muchas gracias Amely por poner comprensión y amor en lo duro y doloroso.
Un relato excepcional!!!!
Hola Ivonne:
Gracias por comentar. Estas lamentables circunstancias son nuevas para todos. Esperemos que las podamos sobrellevar de la mejor forma posible.
Te invito a seguir leyéndonos.
Un gran abrazo.
Querida amiga: Creo que esto es a la vez que increíble y doloroso una de las mejores enseñanzas en nuestra vida… En el fondo somos afortunados de vivir esta experiencia, para poder despertar de una vez y darnos cuenta de que tanto ego, ambición y egoísmo no nos conducen a nada.
La vida es en realidad un continuo superarse y dar lo mejor de nuestra pequeña humanidad al otro… Porque todos nos vamos, hoy, mañana o el año que viene… Y no nos llevamos nada.
Sólo podemos dejar nuestra humilde huella y hasta esas se borrarán con el tiempo.
Estoy agradecida de la vida, porque se que luego de esta experiencia, nada volverá a ser igual… Está visto que desde ahora dejaremos de ser «yo» … Para ser «nosotros» púes este mal trago nos afecta a todos.
Hola Bernie:
Esperemos que la sociedad tome algo de conciencia con esta pesadilla y que en algo podamos cambiar para mejor.
Amely
Ay, mi querida amiga. Así estoy yo pero tengo que seguir en la lucha .
Reza por mi y por todos hay que vencerle y lo vamos a vonseguir. Unos en sus casas y otros ayudando a los enfermos que estan tristes y desolados.
Un abrazo cariño.¡ Saldremos de esta amiga!
Mi querida poeta Victoriana:
Siempre pienso en ti y en la gran labor que desempeñas en el Hospital. Espero que Dios te proteja y a todos los sanitarios. No hay forma alguna de poder darles más las gracias, porque se quedan pocas. Se lo merecen todo, incluso dando esa Paz final a los que parten. Les ha tocado muy difícil y pienso en las familias de los médicos fallecidos. Esos grandes héroes que jamás deberíamos olvidar.
Solo pedir que esto acabe y que la esperanza en un mañana nunca se pierda.
¡Claro que saldremos de esta amiga! con gente tan buena como tú ayudando.
Un gran abrazo.
Amely
Muy buena catarsi animo, eres una guerrera, animo. Y un gran abrazo
Hola Nelson:
No queda otra que ser todos unos guerreros y es una lucha diaria de sobrevivencia y de estar animados a la vez. Muchos de mis amigos poetas aquí en España han dejado de escribir. Somos un colectivo muy sensible. Todo el arte en general está de luto. Nos sentimos a veces sobrepasados por noticias que jamás pensamos que podríamos escuchar.
Te agradezco de todo corazón que me estés siempre animando y que nunca decaiga la Poesía en vuestra Asociación que la llevo en el corazón y alma «Sembrar Poesía» Chile País de Poetas, son el motor que empuja al verso a no morir en Chile y en el mundo. Gracias por esa gran labor.
Con cariño Amely
Conmovedoras tus palabras Amely, al final la principal experiencia que todos tenemos, es la experiencia emocional.
En la cabeza de muchos nos dan vuelta teorías de la conspiración, que en esta pandemia hay poderes que resultan favorecidos, que sus intereses ganan. Lamentablemente, no es descabellado lo que dicen esas teorías. Sin embargo como ciudadano común no me es posible tener certeza para afirmar o negar … pero sí me es posible sacar ciertas conclusiones.
Por ejemplo, que esta dura evidencia de lo frágiles que somos, debe llamarnoss a tod@s, sin importar la raza o el continente donde estamos, ah, y muy especialmente debe llamar a quienes están en posiciones de poder, a hacernos la pregunta :
¿Cómo estamos tratando a la madre naturaleza, cómo estamos tratando a nuestro único hogar el planeta Tierra?
Marcelo:
Siempre he pensado (mi teoría) es que de cualquier cosa que pasa en la vida, en todo ámbito. Jamás se llega a saber la verdad completa. Aunque aquí es demasiado triste todo y muchas vidas en juego. Creo que ahora es momento de cuidarnos y ser positivos. Tanta información tampoco ayuda mucho y deberíamos ser selectivos a la hora de leer. Las redes sociales ayudan mucho para saber lo que el periodismo nos oculta a veces.
Un gran abracito y sinceramente espero que en Chile se logre estabilizar pronto este virus.
Así es, simplemente una tragedia que tiene al mundo de rodillas delante de todos los dioses que desde lo alto observan al hombre humillado, como simples hojas volveremos a nacer, más humildes, talvez, hasta que nuestro egoísmo y naturaleza egocéntrica nos lleve nuevamente al ocaso del olvido y volvamos a ser los mismos seres indolentes anteriores a esta pandemia.
Rosita:
Yo espero en Dios que no olvidemos tan fácilmente toda esta tristeza. Que los egos se queden en los días de cuarentena y que no vuelvan a florecer. Necesitamos cada día tener empatía por el próximo.
Bendiciones…
Así es amiga mía. Temor e incertidumbre reina en todos nosotros. Te abrazo con amor… Ariam Diesel
Ariam:
Estuve tan cerca de conocerte en Villa Alemana y aunque uno a veces propone o planea cosas. Al final el que siempre tiene la última palabra y el que nos guía es nuestro Dios. Espero que podamos algún día hacer un recital en la Quinta Región con mi hermano también. Son esos sueños que se alojan entre corazón y venas y que te dan la vida. Porque sin sueños ni proyectos, esta vida se vuelve demasiado triste en estos tiempos.
Gracias por estar y llevar la poesía a todos los rincones.
Muchas Bendiciones para ti y toda tu familia.
Amely
Mi querida AMELY, estamos todos igual de angustiados, improvisando fortaleza y ánimo para sostener a los demás y medio engañarnos a nosotros mismos, pero, yo, como creyente, creo que debemos volcar nuestros ojos y nuestro corazón al cielo y estar dispuestos a realizar cambios reales en nuestra manera de vivir y relacionarnos con los demás. Te abrazo con mucho cariño .
Así es María Loreto:
Creo que esto es una difícil y triste prueba para aprender, para evolucionar y sobre todo para cambiar y reemplazar lo que puede resultar malo dentro de nuestras actitudes. Codo a codo, cada ser humano debe ser parte importante de este cambio, porque lo que le va beneficiando a uno, lo va disfrutando también el otro. Somos una sociedad en equipo y debemos remar todos para el mismo lado, hoy más que nunca. Ser creyente ayuda y sostiene en estos momentos. Yo no concibo una vida sin creer en un Ser Superior. Creo que no podría resistirlo.
Ánimo y fe corazón. Esto pasará pronto y no dejes de escribir…
Muy bonito
Isabelita:
Muchas gracias por leer lo que escribo y por apoyarme desde que me conociste. Ya sabes que últimamente en mi vida he tenido muchos altibajos, pero no me canso de pedirle a Dios que nunca pierda la ilusión de escribir, porque es el aire que respiro.
Cuídate amiga bella, tu marido, nietecitos y la linda familia que tienes les deseo lo mejor. Ya sabes que te quiero mucho.
Amely
Es una realidad Cruel y nos está dando una lección de vida así como tú lo cuentas amiga linda, lo dijiste todo, abracitos y cuidate mucho.
Hola Ely:
Te doy las infinitas gracias por comentar en estos humildes escritos que salen directamente desde mi alma y que no tienen otro fin que comunicar y sensibilizar. Porque a veces no somos conscientes de que hay señales que nos quieren decir algo. No todo es parte de un destino o una casualidad. Hay hechos que nos llegan como latigazos de desesperanza para hacernos reaccionar. Esto ha sido muy duro, porque son muchos los fallecidos en todos los países. Solo nos queda pedir que Dios nos enseñe lo que quiere que aprendamos en esta triste lección de vida que nos ha tocado estos meses.
Lo más importante es nunca perder la esperanza.
Un gran abracito de salud y cariño amiga Panosillo.
Amely… también tengo la esperanza de esa segunda etapa… Es más, es lo que me sostiene, porque de otra forma, no me explico ésta mega catarsis. Al igual que tu, amiga mía, me costó mucho asumir todo lo que sucede. A pesar de considerarme una persona positiva, ante dantesca situación es normal caer en la desesperanza.
Solo queda escribir y esperar pacientemente, elevando oraciones para que acabado el desastre, valga la pena el relevo en la humanidad. Un abrazo virtual, ansiando nuevamente uno de verdad ???❤❤❤
Querida Alicia:
Lo que realmente me da fuerza para intentar mirar un futuro con optimismo después de esta terrible situación es lo que tú dices: «Una segunda etapa» y confío con toda mi alma que tiene que venir y que nos ha marcado tanto esto que seguro que saldremos fortalecidos y valorando cada detalle aún con más fuerza que antes.
Yo creo que hasta las personas más positivas nos hemos decaído en varias oportunidades. Esto no es fácil. Es un desastre, como bien lo defines. Sólo pido a Dios resignación para los familiares que han perdido a un ser querido y una pronta recuperación para los que aún permanecen en los hospitales del mundo.
Por supuesto que tenemos que abrazarnos y seguir haciendo cosas por la cultura y por un mañana lleno de nuevas creaciones. Que así sea…
Bendiciones amiga.
Amely
Bello relato desde la experiencia de un confinamiento al que ninguno de nosotros estábamos preparados a vivir; en efecto, muchas tramas de las películas de ciencia ficción o terror auguraban estos escenarios, pero nada se compara a vivir cerca la muerte, cuando ella toca a la gente cercana y tú mismo, te conviertes en su potencial víctima. Gracias Amely por tu relato!!
Hola Alex:
Yo nunca pensé vivir algo así, te lo digo desde mi mente inquieta e imaginativa que no para de pensar en cosas para plasmarlas en el papel. Esto me ha superado desde el primer momento. Ya sabes como soy yo, no puedo estar encerrada y el primer día me dije: «yo no podré…» y ya ves, aquí me tienes, he salido solo tres veces a comprar al supermercado. No sé si es miedo, cautela o espíritu de supervivencia, no sé cómo llamarlo, pero te puedo decir, que lo estoy llevando tan bien que hasta yo misma me sorprendo. Debo admitir que rezo todos los días y pido paciencia al Universo. Te vas enterando de gente que va falleciendo. Te caes, te levantas, te vuelves a caer y así vamos en unos días que parecen irreales. Ojalá todo hubiera sido una pesadilla y nada más. Pero no, es la realidad que nos ha tocado vivir y esperemos salir fortalecidos y que nos haga mejores personas y no olvidar sobretodo el sufrimiento de nuestros semejantes.
Un abrazo grande querido primo!!!!